Cigarrillo electrónico para dejar de fumar por prescripción médica

Esta decisión se plantea debido a la evidencia probada de que el vapeo es un 95% menos perjudicial que el tabaco, ya que si bien la nicotina actúa sobre el cerebro de los fumadores produciendo placer y dependencia, no es el componente más nocivo del tabaco. El problema extremo y mayor causante del consumo de tabaco son las sustancias tóxicas que se liberan de la combustión. 

Es por ello que durante años se han aplicado como fórmulas para dejar de fumar los parches y chicles con nicotina, ya que no es esta sustancia la que produce el mayor riesgo. Aquí es donde entran con fuerza los vapeadores como tratamiento en el Servicio Nacional de Salud que plantean desde Reino Unido. Ya que estos dispositivos no tienen combustión alguna, si no que lo que se produce es un calentamiento de una solución líquida a base de glicerina vegetal o propilenglicol y a la que podemos añadir nicotina, pero no se quema.

Como bien explican en este artículo que habla sobre los cigarrillos electrónicos por prescripción médica, el vapeo fue la ayuda más popular utilizada por los fumadores de Reino Unido en 2020 con un éxito de más del 27%, nueve puntos por encima de las cifras de quienes intentaron utilizar otro método como parches y chicles. Y los números son abrumadores para quienes siguieron este método de reemplazo con ayuda de los servicios locales para dejar de fumar vapeando alcanzando un 68% de éxito entre 2020 y 2021. 

El proceso aún está en desarrollo, ya que los fabricantes de vaper tendrán que solicitar el proceso de aprobación reguladora para entrar en el programa de prescripción médica para dejar de fumar vapeando. Una vez conseguido los médicos evaluarán caso por caso y acompañarán en el proceso de dejar de fumar con vapeadores a sus pacientes. Sin duda alguna una valiente y acertada decisión en un país que el tabaquismo causó 64.000 muertes en 2019. 

Además los cigarrillos electrónicos regulados en Reino Unido como medicamentos podrían contener mayores cantidades de nicotina que las permitidas para la venta comercial, ya que estarían acompañados de supervisión médica. Esta decisión de las autoridades sanitarias inglesas también se produce a pesar de las presiones internacionales por la tendencia a consumir vapeadores y abandonar el tabaco.