Mantener nuestro vaper en buenas condiciones no solo ayudará a mejorar su rendimiento, sino que también ayudará a que tengamos una mejor experiencia de vapeo y alargará su vida útil.
El primer paso que debemos dar es desmontar las partes principales de nuestro vaper, como, por ejemplo, el atomizador y las baterías. Esto nos facilitará el acceso a todas las partes que necesitemos limpiar.
Para la limpieza del atomizador hay que diferenciar entre atomizador comercial o atomizador reparable.
Para limpiar un atomizador comercial tendremos que desmontar el atomizador lo máximo posible. Una vez que nuestro atomizador está desmontado, sin resistencia y fuera del mod, tendremos que eliminar todo el líquido que pueda quedar en el depósito. Para esto podemos meter las piezas debajo del grifo o en un vaso de agua caliente.
Una vez hayamos limpiado bien todas las piezas de nuestro atomizador, tendremos que secar bien todas las piezas con un papel o con un paño de microfibra y dejar secar por completo al aire. Es importante que a la hora de volver a montar nuestro atomizador esté completamente seco y sin ningún resto de agua.
Cuando todas las partes de nuestro atomizador estén completamente secas, podremos volver a montar nuestro dispositivo con una nueva resistencia.
Por el contrario, para limpiar un atomizador reparable, puedes utilizar la técnica llamada Dry Burn para la resistencia y el mismo método de limpieza que en los atomizadores comerciales para el resto de piezas.
Para realizar correctamente la técnica Dry Burn tendremos que desmontar nuestro atomizador y retirar el algodón usado con unas pinzas de cerámica.
El siguiente paso será calentar la resistencia a muy baja potencia y esperar a que se ponga al rojo vivo. Una vez que hemos alcanzado ese punto, dejaremos que baje un poco la temperatura de nuestra resistencia y la meteremos debajo del grifo o en un vaso de agua. Hacer esto repetidamente hasta que veamos que nuestra resistencia está limpia y lista para volver a usarse.
Además de esto, podemos cepillar nuestras resistencias con un cepillo de dientes una vez que hemos terminado con el proceso de Dry Burn. Esto habrá que hacerlo con cuidado para no dañar los hilos de las resistencias de nuestro vaper.
Una vez que hemos terminado con los procesos anteriores, enjuagaremos bien todas las piezas de nuestro atomizador con agua, asegurándonos de que no quede ningún resto.
Para finalizar, dejaremos secar todas nuestras piezas y ya podremos montar de nuevo el algodón en la resistencia y completar el montaje de nuestro atomizador.
Una vez que hemos limpiado nuestro atomizador, tendremos que limpiar también nuestro mod. Esta es la parte electrónica, por lo que no podremos utilizar agua ni líquido. La manera más sencilla de hacerlo es con un paño o con papel. Limpiaremos todas y cada una de las partes que podamos y tengamos acceso.
Si nuestro vaper es de batería externa, tendremos que limpiar bien los contactos de las baterías, para optimizar un buen contacto y una buena conductividad.
Para terminar, es importante recordar que, mantener nuestro vaper en un lugar fresco y seco será de gran ayuda a la hora de conservar de manera óptima nuestro dispositivo.
Realizar estas tareas de mantenimiento y limpieza en nuestro vaper ayudará a mejorar su rendimiento y alargará su vida útil.
No olvides que, si tienes cualquier duda de cómo mantener limpio tu vaper o cigarrillo electrónico, puedes ponerte en contacto con nosotros a través de cualquiera de nuestro canales de atención al cliente.